¿Cómo puede ser que una fábrica donde todos los ingredientes utilizados son kosher y sin embargo, el status del producto será determinado si es kosher o no basado en su apariencia? La respuesta es el pan lácteo.
Aparte de las obvias restricciones de que el pan kosher sólo puede contener ingredientes kosher y ser fabricado en un equipo kosher, La ley kosher establece que el pan solo puede contener ingredientes parve (es decir, no puede contener leche ni puede contener carne).
Esto se debe a que el pan se considera el alimento básico de cada comida. Si se permitiera que el pan contenga productos lácteos, se podría confundir al servirlo junto con carne. (Dentro de las leyes kosher está estrictamente prohibido mezclar la leche y la carne).
Un hotdog o una hamburguesa en un bollo sería desastroso para un consumidor kosher si el pan contiene productos lácteos.
No solamente está prohibido comer pan lácteo directamente con carne, sino que también no se puede servir en la misma comida donde haya carne. Debido a la posibilidad de confusión, fue legislado hace más de dos mil años que el pan kosher siempre debe permanecer parve. Esta regla sigue vigente hasta el día de hoy.
Sin embargo, hay ciertos panes que se permiten hacer con productos lácteos. La ley kosher permite pan lácteo, siempre y cuando tenga una apariencia lógica que contiene productos lácteos y se pueda discernir.
Por ejemplo, si el pan tiene queso por encima, como la pizza, entonces no hay preocupación de que se servirá accidentalmente en una comida de carne. Cualquiera que ve una pizza sabe inmediatamente que es láctea.
Sin embargo, a veces el pan lácteo no es tan fácil de identificar. Por lo tanto, cualquier solicitud de certificación de pan con ingredientes lácteos deberá ser cuidadosamente evaluada. Cuando se trata de pan lácteo, es la apariencia del pan, que juega el papel fundamental.