Les compartimos una entrevista con el Rabino Nissim Hilu sobre kosher en México y One Kosher.
¿Cómo surgió One Kosher?
One Kosher nació en 2007 gracias a la visión de un empresario llamado Moshe Saba que buscaba unir en un solo organismo a toda la colectividad judía en México. Entonces, existía un monopolio donde solo una certificadora dominaba el mercado y había empezado a decretar políticas muy drásticas que discriminaban a la gente y estableciendo que nadie era lo suficiente bueno para dictar una certificación.
Desde entonces, hemos crecido gracias a nuestras claras políticas de trabajo. Contratamos supervisores de manera independiente y nos aseguramos de que sus habilidades correspondan con nuestras estrictas reglas de supervisión. Con el apoyo de varios industriales como Moisés Saba, Jacobo Cojab, Salomón Helfon y Simón Salame, entre otros, el proyecto comenzó a tomar ímpetu: no solo certificábamos productos sino banquetes, fábricas, rastros de carne y restaurantes… empezamos a ofrecer otra opción para la comunidad.
Creemos firmemente que todas las certificadoras aportamos valor y que lejos de competir entre nosotras, debemos trabajar en conjunto para estandarizar las normas y lograr tener más variedad de productos de excelente calidad a mejores costos.
Actualmente, damos supervisión solamente a establecimientos que cuentan con calidad en sus materias primas, productos y servicios como las pastelerías Garabatos, con más de 100 sucursales, heladerías Moyo con más de 150 sucursales en el país o carnicerías Kurson Kosher que también cuentan con certificaciones de Estados Unidos e Israel, incluyendo a la prestigiosa Orthodox Union con la cual hemos hecho alianza para supervisar sus procesos en México.
¿Qué productos certifican?
A 14 años de su inicio, One Kosher cuenta con más de 350 empresas certificadas, de las cuales alrededor de 70 son miembros de la comunidad y a las que se les cobra solamente una cuota simbólica con el fin de ayudarlas a crecer como negocios exitosos. El público nos identifica no solo como una agencia confiable sino como una puerta de oportunidad de crecimiento.
En nuestro país existen empresas productoras de alimentos que operan desde el comercio artesanal y local hasta empresas internacionales que llevan nuestros productos y materia prima a todo el mundo. One Kosher ha logrado abrir mercado con empresas de todos los tamaños, certificando por ejemplo panaderías locales al mismo tiempo que supervisando materia prima y procesos en empresas trasnacionales como Kellogg´s.
El mercado de productos kosher ha ido creciendo en los últimos años. Aún dentro del mismo mercado de la comunidad, se ha presentado un interés mayor por las nuevas generaciones a seguir kosher gracias al aumento en variedad de productos. Actualmente, el mercado general busca marcas en las que pueda confiar, con etiquetas claras e ingredientes de calidad. One Kosher ha posicionado en los últimos años al sello kosher precisamente como un sello de calidad, más allá de ser una garantía de cumplimiento de reglas religiosas. Esto ha abierto puertas a otros mercados religioso como el musulmán, y no religiosos o con dietas específicas como KETO, intolerantes a la lactosa, vegetarianos, etc.
¿Cómo es el mercado kosher en nuestro país?
Es impresionante el crecimiento del Kosher en México, ya que encontramos muchas comunidades emergentes en todo el país: en ciudades como Puebla (al Este de la capital), Toluca, Guadalajara, Monterrey, Mérida y Cancún además de presencia de Chabad en muchas playas del caribe mexicano. Estos mercados se surten generalmente directo desde la capital incrementando el costo, lo cual a promovido el surgimiento de empresas locales para atender sus necesidades.
Existen también muchas familias de gentiles que han empezado a comprar productos kosher y se han familiarizado con el judaísmo buscando incluso la conversión en Estados Unidos e Israel.
En el mercado existen dos tipos de compradores: aquellos que compran a ciencia cierta buscando un producto Kosher como una medida de salud y lo que lo hacen por creencias religiosas.
Actualmente la mayoría de la población ha escuchado sobre kosher, aunque no están seguros qué significa. Alguna vez al ofrecer los servicios kosher a Kellogg´s, el gerente me pregunto quién en el público mexicano estaría interesado en tener el símbolo kosher en sus cajas. Le pregunté si cualquiera de sus empleados sabía el significado de la ISO9000, por ejemplo. Le aseguré que no, pero que sabría que es algo bueno y que la empresa buscaba para vender más. Lo mismo sucede con el sello kosher.
Creo fielmente que aquella empresa que ostenta el logo kosher, además de contar con una certificación externa que verifica procesos y orígenes confiables de sus materias primas también se encuentra en el grupo élite dentro del mercado que genera más ventas, simplemente por añadir valor a su marca.