Shabat Noaj: Hashem le ordena a Noaj que construya un arca para salvarse del diluvio y los sabios preguntan: Sabemos que el diluvio arreció en todo el mundo fuera de Israel, la tierra santa. Entonces para que construir un arca? Que le ordene a Noaj que vaya con su familia a Israel, de la misma forma que le ordenó a Abraham que deje su tierra y se instale en Israel? De esa manera se salvaría sel Mabul?
Una respuesta de los sabios es que aunque no cayó el diluvio en Israel, sí cayeron lluvias que venían acompañadas de granizo y golpeaban con fuerza que los podía dañar. Eso alude a que debemos percatarnos nosotros, y especialmente para nuestros hijos, que la influencia externa puede dañar la espiritualidad de la persona. Y debemos cuidar en nuestra Arca, nuestra casa, la educación de nuestros hijos.
Por otro lado, nos cuenta el Midrash que Noaj debía alimentar a todas las criaturas que entraron al arca. En una oportunidad, Noaj se atrasó en darle el alimento al león, y éste, enojado, le propinó un golpe que lo dejó cojo. Eso no insinúa que a Noaj le faltaba un tanto de misericordia, favor, benevolencia. Por el contrario, Abraham representa al Jesed, favor, toda su vida la dedicó para prodigar a los demás. Eretz Israel es la tierra del favor, de la benevolencia. Abraham era meritorio de la tierra de Israel. Noaj no llego a esa categoría. Por lo tanto no tuvo el mérito de llegar a Israel.
Queridos hermanos: los ojos del mundo están puestos en Israel. Los ataques continúan. No nos vamos a rendir. Hashem está con nosotros. Somos el pueblo de la misericordia. Nos culpan de atacar a otros cuando somos los atacados. La opinión pública siempre estará en contra. Pero tenemos a nuestro Padre y Rey que nos defiende, y seguiremos fuertes en Su tierra, nuestra tierra prometida, y se acabarán nuestros enemigos y los que quieren el mal. Sigamos pidiendo por nuestros hermanos en Israel y por nuestra Tierra amada.
One Kosher te desea Shabat Shalom.