La Torá describe la reacción de Yaakov Avinu ante su inminente encuentro con Esav. Yaakov se asustó mucho” Los Sabios en el Talmud (Berajot 4a) comentan que la reacción de Yaakov es desconcertante. Aparentemente, no tiene motivos para preocuparse porque Hashem ya le había prometido “He aquí, Yo estoy contigo y te protegeré dondequiera que vayas”. Los Sabios explican que Yaakov estaba preocupado, que un pecado no lo hiciera merecedor del cumplimiento de la promesa de protección de Dios. David Hamelej, (el rey David) mostraba la misma actitud de cautela y duda de sí mismo.
Con el beneficio de la retrospectiva, sabemos, por supuesto, que Yaakov Avinu seguiría mereciendo la protección divina. Del mismo modo, David Hamelej conservó su lugar entre los justos. ¿Debemos concluir que sus temores eran infundados, que sus dudas estaban fuera de lugar?
Muy al contrario, la lección que nos enseñan los Sabios es que Yaakov Avinu no pecó y David Hamelej siguió siendo justo precisamente porque desconfiaban de la posibilidad de pecar y retroceder. La duda sana y realista que mostraron Yaakov Avinu y David Hamelej impidió que la complacencia y la petulancia infectaran sus almas. Por lo tanto, estaban constantemente vigilantes para evitar el pecado.
Una vida real no puede dar cabida a la complacencia ni a la petulancia. La vida, es una cadena continua e ininterrumpida de pruebas y por lo tanto, es imposible costear espiritualmente. El hombre, por fuerza, explica Rav Jaim de Volozhin y el Baal Shem Tov, es quien se mueve o avanza espiritualmente prevaleciendo en las pruebas de cada día, o, Dios no lo quiera, retrocede fracasando.
La naturaleza dinámica de la existencia humana, que no permite el relajamiento, es, aunque lo intente, por bondad de Hashem. Hashem quiere que desarrollemos todo nuestro potencial. No quiere que nos conformemos con menos. Hashem se parece a un profesor con alumnos que pueden alcanzar un notable alto con el mínimo esfuerzo. La promesa o la perspectiva de un sobresaliente si se esfuerzan no les motiva. Se contentan con una nota de notable. ¿Qué hace el profesor para motivarlos? Diseña el curso de tal manera que su notable nunca está garantizado. Simplemente no pueden mantener su notable alto. O mejoran o empeoran. Cuando se enfrentan a esta dura alternativa, los estudiantes deben ser galvanizados.
Así también, Hashem diseñó la existencia humana como un ejercicio ininterrumpido para hacer frente a loa retos. Al hacerlo, excluyó la opción de no hacer nada, con el fin de impulsarnos a alcanzar todo nuestro potencial. De acuerdo con esta idea haríamos bien en hacer una introspección para determinar hasta qué punto nuestra actitud refleja la de Yaakov Avinu.
¡One Kosher te desea Shabat Shalom!
En recuerdo de la Bendita memoria de la Mora Ruthy Zayat (Feige Ruth bat Esther Ite).