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Cera de abeja, polen de abeja y propóleos de abeja

La cera de abejas es una sustancia segregada por las glándulas del abdomen de las abejas.  Las abejas utilizan esta cera para crear los panales en los que almacenan la miel.  La cera de abejas se utiliza en los alimentos como recubrimiento de las frutas para prolongar su vida útil, para dar brillo a los caramelos redondos como los chocolates, las gomitas, los jelly beans, como base de un aromatizante y también se usa como el extracto de cera de abejas.

El polen de abeja es la sustancia amarillenta o verdosa en forma de polvo que recogen las abejas y que procede de las flores. Las abejas transportan el polen en las cestas de polen que tienen en sus patas. El polen contiene la contribución de la flor masculina a la siguiente generación de plantas. Las abejas melíferas mezclan el polen con algo de néctar para formar una mezcla llamada pan de abeja que es un alimento rico en proteínas utilizado para alimentar a las larvas. El polen está disponible en las tiendas de alimentos saludables. Algunos creen que el polen tiene características antibióticas, así como muchas vitaminas y enzimas saludables.

El propóleo es una resina que las abejas recogen, en sus patas de los árboles y la utilizan en su colmena como sellador y para otros fines. La composición química del propóleo es la siguiente: resinas (45-55%), ceras y ácidos grasos [de cera de abeja o de origen vegetal] (25-35%), aceites esenciales [de plantas] (10%), polen (5%) y otros orgánicos y minerales (5%)[3].

El propóleo está a la venta en tiendas de alimentos saludables y es un aditivo en algunas pastas de dientes porque se ha demostrado que el propóleo tiene propiedades antibacterianas.

¿Acaso son kosher la cera de abeja, el polen y el propóleo?

Como regla general, todo lo que emana de una fuente no kosher (yotzeh min hatame), es en sí mismo no kosher. La Guemará, Berajot 7b ofrece dos explicaciones de por qué la miel es kosher: 

1) Dado que las abejas no segregan miel de su cuerpo, sino que sólo convierten el néctar recogido, su miel es permisible. La Guemará señala que, según esta razón, la miel de otros insectos que tampoco segregan estaría también permitida.

Según esta razón de la Guemará parecería que la cera de abeja, que es segregada por el cuerpo de la abeja, debería, de hecho, estar prohibida. El polen y el propóleo, que simplemente son recogidos por la abeja de fuentes kosher y no son secreciones, deberían estar permitidos.

2) En su segunda opinión, la de R’ Yaakov, la Guemará dictamina que existe una excepción bíblica que sólo permite la miel de abeja.  Según esta opinión, la miel de otros insectos no está incluida en la excepción bíblica y, por tanto, no es kosher. Existe la duda de si la excepción bíblica se limita a uno de los siguientes casos:

(a) la miel de abeja

(b) los productos apícolas que no son secretados

(c) todos los productos apícolas.

3) La cera de abeja debe ser permitida según (c) y prohibida según (a) y (b). El polen y el propóleo deben ser permitida según (b) y (c) y prohibida según (a). Sin embargo, incluso según (a) el polen y el propóleo son permitidas, ya que, a diferencia de la miel, en la que la abeja altera el sabor o el color del néctar, el polen y el propóleo no son productos de la abeja, sino que son simplemente recolectados por la abeja. Por lo tanto, incluso según R’ Yaakov no salen de un origen impuro, por lo tanto son kosher. 

El propóleo puede contener trazas de saliva de abeja y otras secreciones. Aparte de la cera de abeja, el porcentaje de secreciones de las abejas es ciertamente inferior al 5%, es decir, el total de minerales y sustancias orgánicas no identificadas. Es muy probable que el porcentaje sea menor, ya que incluso en la miel, en la que se utiliza la saliva como enzima que invierte los azúcares del néctar, el porcentaje es inferior al 1%.

En cualquier caso, dado que el propóleo no es un alimento, ya que es esencialmente una sustancia gomosa y se consume por sus supuestos beneficios para la salud, cualquier ingrediente no kosher es batel berob (la mayoría del producto es kosher y una parte mínima es no kosher).

Por tanto, parece claro que el polen está permitido. El propóleo contiene cera de abejas y puede depender del estatus de la cera de abejas, nuestra próxima discusión. Como veremos que la cera de abeja está permitida, el propóleo es kosher.

El Shulján Aruj 81:9 dictamina que la miel producida por otros insectos está permitida y luego cita una segunda opinión , según la cual dicha miel está prohibida.  Dado que el Shulján Aruj parece estar a favor de la primera opinión, parece que la cera de abeja debería estar prohibida, por lo que las diferentes interpretaciones de la segunda opinión son una cuestión discutible por la halajá.

Sin embargo, la cera de abejas parece ser kosher por varias razones:

1) Los Poskim contemporáneos, como Rav Shlomo Zalman Oyerbaj, Rav Eliashiv y Rav Vozner son citados, ellos permitieron su uso. Entre las razones dadas están que la cera de abejas no está sujeta a la prohibición de yotezé min hatamé (salir de un origen impuro) ya que se considera como pirshá (es decir, material de desecho) ya que no es un alimento y es como el polvo. Además, la costumbre en general, es permitirlo.

Esta postura está respaldada por el Maguen Abraham, que escribe que la cera de abeja no es comestible. El Igrot Moshé escribe que incluso según el Rambam, que sostiene que los huesos no comestibles son prohibidos es porque son del propio cadáver; pero el que sale de una prohibición que no es propicio para comer es completamente permitido.

2) Igrot Moshé sugiere -entre otras muchas razones- que la goma laca puede estar permitida ya que no es digerida por el cuerpo humano. La cera de abejas, que tampoco es digerible, debería estar permitida. El hecho de que la cera no es digerible fue verificado por un miembro del Departamento de Biología de la Universidad de Duke.

3) Existen importantes pruebas secundarias que se citan en la literatura. A continuación se enumeran algunas fuentes.

  1. Los rishoním: señalan que la miel se produce fundiendo el panal y separando así la miel de la cera. Si la cera de las abejas no es kosher, el derretimiento del panal impartiría bliot de la cera a la miel, haciendo así que la miel no sea kosher.
  2. El Tur y el Magen Abraham: dicen que se deben utilizar velas de cera de abeja para bedikat jametz y no velas de grasa animal, ya que pueden gotear sobre la vajilla, lo que las convierte en no kosher. Si la cera de abejas no es kosher, no se gana nada sustituyendo las velas de grasa animal por cera de abejas.

La cera de abejas es kosher a pesar de ser el producto de la secreción glandular de las abejas ya que (a) es pirshah debido a su inedibilidad (b) no es digerible. El polen y el propóleo son kosher ya que son recogidos por las abejas y no son procesados por ellas. Cualquier material dudoso que pueda encontrarse también en el propóleo se anula por la mayoría siendo kosher.

Extraído de información OU.

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